Y llegó el gran día y con toda la ilusión nos hemos ido a adornar nuestro árbol. Eso sí, con nuestro altavoz y acompañándonos con villancicos para transmitir nuestra alegría a todo el pueblo.
Cuando hemos llegado al cole, hemos celebrado también nuestro particular «Fin de año», pero en vez de comernos las uvas, nos hemos comido gusanitos con las campanadas, después hemos lanzado un montón de serpentinas en el patio del cole y nos hemos hecho muchas fotos en el photocall navideño.
¡Ha sido un día inolvidable!